We don't need no modern Jesus

jueves, 29 de octubre de 2015

Desvanecerse

No es mentira que resulta mucho más fácil escribir mientras uno está triste o de malas, porque ¿quién querría leer las buenas noticias ajenas? Las personas están más interesadas en conocer ese recóndito espacio donde ocultamos las tristezas y los secretos.
Y sí, todos lo tenemos. Algunos se esfuerzan más que otros por mantenerlo ahí donde está, por las dudas de que se rompa y no haya nadie a quien culpar. Pero otros, menos cobardes, menos reservados lo desempolvan con altura de vez en cuando para evaluar qué tanto se puede decir, qué tanto hay que ocultar.
Una vez hace no mucho me perdí como era de esperarse, en esos pasillos oscuros de la mente humana mientras en el exterior me acuerdo de estar cantando Do I wanna know mientras acomodaba papeles. Algo tuvo que pasarme en el semblante, en los movimientos de mis manos para que volviera de ese lugar. Y cuando volví, no había papeles por ordenar, ni canciones de banditas indies para cantar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario